Juegos Centroamericanos y del Caribe XII, «el compromiso es de todos»

Nov 30, 2024

El deporte dominicano cambió con la llegada de los Juegos Centroamericanos y del Caribe en el año 1974. Un país que vivía en una inestabilidad social observó durante 14 días una fiesta deportiva con 23 naciones. 

 Las delegaciones arribaron desde el 23 de febrero a la tierra de Duarte, Sánchez y Mella con el ímpetu y las ganas de sobresalir por los cielos. 

 Pese a las dificultades de la época, el viaje en avión fue la opción número uno para varios países; Colombia, El Salvador, Islas Vírgenes, Nicaragua, Cuba, Venezuela, Jamaica, Puerto Rico, Barbados, Honduras, Guatemala, Antillas Holandesas, Guyana, Bahamas, Belize, Bermudas, México, Puerto Rico y Venezuela aterrizaron en el Aeropuerto de Las Américas.

 Haití, Costa Rica y Surinam fueron las últimas delegaciones en presentarse a la justa regional. 

 El 27 de febrero, desde las 4:00 de la tarde, los representantes participantes desfilaron sus trajes y banderas. El despliegue de la cultura centroamericana y del caribe iniciaba en Santo Domingo. El público también se vistió de gala, y alrededor de 30,000 personas asistieron al Centro Olímpico Juan Pablo Duarte con el deseo de presenciar un espectáculo. 

 Cuba fue la dominante en los juegos con un total de 191 medallas, 101 de oro. El béisbol, la gimnasia, el levantamiento de pesas, boxeo y parte del atletismo fueron algunas disciplinas que provocaron que «La Bayamesa» se tocará en varios recintos del evento. 

 México con 82, Venezuela con 55, Puerto Rico con 69 y Colombia con 44 no se quedaron atrás en ser cuatro de los únicos cinco países en sobrepasar la marca de 30 distinciones o más. 

 Costa Rica, Antillas Holandesas, Panamá, Barbados, República Dominicana, Islas Vírgenes y Belice lograron atrapar cada uno una insignia de oro. Fueron las primeras medallas enchapadas en ese material para Islas Vírgenes y Belice. 

 Trinidad y Tobago, El Salvador, Bahamas, Bermudas, Guatemala, Guyana, Haití, Suriname se adjudicaron condecoraciones, pero no tocaron la gloria de las preseas doradas. 

Atletas que pasaron a la historia

 Mirian Villacián, «la rubita cubana», es uno de esos rostros que no se olvidan, su talento en el evento fluyó como río en un caudal, enseñando cualidades fuera de serie en gimnasia.  Alcanzó los máximo honores en puntuación individual general. Gano oro en las pruebas de barras asimétricas, plata en el salto sobre caballo y en los ejercicios de las manos libres.

 Las cubanas Carmen Valdez, «la cubanita», Aurelia Penton y la mexicana Bradley Charlotte colocaron a los fanáticos que visitaban el Estadio Olímpico de pie. Las tres establecieron récords centroamericanos en las finales de sus categorías, 200m, 400m y 800m respectivamente. 

 Valdez, alcanzó oro en los 100 metros planos imponiendo una nueva marca centroamericana con un tiempo de 11.55 segundos. Penton estableció un nuevo récord centroamericano en los 400 metros planos, con un tiempo de 52.27 segundos, ganó la medalla de oro, mientras que Charlotte alcanzó un tiempo de 2:04.5 minutos e impuso un nuevo récord centroamericano, también alcanzó la medalla de oro en una final llena de emoción frente a Aurelia Penton.

 La resistencia del colombiano Victor Mora también se hizo presente, recorrió en la final de los 5,000 metros la pista olímpica en 13:54.2 minutos, logrando un nuevo récord centroamericano y del caribe.

El béisbol encontró un dueño del bateo con Rodolfo Puente, Cuba, que colocó un porcentaje de .500. 

 En la natación masculina México ganó 11 premios de oro, hito histórico ya que historiadores cuentan que el país norteamericano nunca había sido competitivo en ese renglón.

 En las femeninas, Ileana Morales se alzó como la gran protagonista. Cuál si fuera pez en el agua, la venezolana avasallar a sus rivales quedándose con el primer lugar en las pruebas estilo libre de 200, 400 y 800 y 200 de estilo mariposa. 

 María del Milagro París, la pequeña de estatura pero gigantesca de corazón, conquistó tres pruebas, (100, 200 dorso y 200 mariposa) también ganó dos medallas de plata y una de bronce. Implantó récords y lo más importante; se robó el corazón del público. 

 El equipo de softball femenino de Belice acaparó muchas miradas y también consiguió varias victorias (9 de 10) que las llevaron a una histórica medalla de oro. Linda Lewis, lanzadora, fue una de las chicas que guío a las beliceñas al oro centroamericano. 

 Fernando Bernal fue uno de los más destacados en el levantamiento de pesas, incluso rompió y estableció nuevas marcas, con biatlón de 355 kilogramos. Se llevó un total de tres honores de oro y destrozó los récords que había fijado cuatro años atrás en Panamá 1970.

 Amaury Cordero fue el único dominicano en ganar una medalla de oro, lo hizo en las competencias de levantamiento de pesas en los 145 kg.

 Una huella imborrable

 1974, será una fecha imborrable para el ejercicio caribeño, fue un abrazo lleno de amor por parte del pueblo quisqueyano con el deporte de alto nivel. Un antes y un después en la infraestructura y competitividad de Quisqueya la bella. 

 14 jornadas llenas de historias y momentos auténticos. El deporte siempre recordará los Juegos Centroamericanos y del Caribe 1974. ODECABE, (hoy Centro Caribe Sports) con sus 23 representaciones dejó una huella permanente en el país caribeño. 

 Juan Ulises García Saleta, «Wiche», fue uno de los grandes personajes de los juegos, el que encaminó y cambió todo. Queda corto cualquier párrafo dedicado a la figura del hombre que es conocido como «el padre del olimpismo dominicano», según Américo Celado, presidente de la Asociación de Cronistas Deportivos de Santo Domingo. 

 El Centro Olímpico Juan Pablo Duarte, que es un inmueble importante en la República Dominicana, no estuvo solo, lo acompañaron también: Club Naco, Estadio Quisqueya, Estadio Estrella Sadhala, Club Oficiales de las Fuerzas Armadas, Teatro de Bellas Artes, Polígono del campamento 27 de febrero, Club Náutico de Andres, Auditorio Eugenio María de Hostos, Gimnasio San Vicente de Paul.

 La reunión llegó a su fin el 13 de marzo de 1974 frente a un Estadio Olímpico repleto de personas y atletas que se unieron para darle final a los Juegos Centroamericanos y del Caribe XII, los Doce Juegos… Los juegos mostraron que el compromiso es de todos.

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