MIREYA LUIS: TOCANDO EL TECHO DEL ÉXITO
Mireya Luis es reconocida como una de las mejores jugadoras de voleibol de todos los tiempos. Con tres medallas de oro en Juegos Olímpicos, demuestra la importancia de creer en sí mismo, desde el primer momento, para cumplir Sus sueños.
Luis pudo no haber sido atleta pero su convicción en búsqueda de su felicidad, fue mucho más grande. Su entrada en el mundo del voleibol es inspiradora y emblemática. Durante una prueba para una escuela de deporte, a pesar de ser ignorada por su baja estatura, Mireya se acercó a la profesora y le declaró con seguridad: «yo toco el techo».
Antes de que la profesora pudiera responder, Mireya saltó y tocó el techo, demostrando su capacidad física y audacia. De esa forma marcó el inicio de una carrera deportiva estelar.
Poco a poco, Mireya fue adquiriendo experiencia y se convirtió en una pieza clave del equipo nacional cubano de voleibol, además de ser campeonas olímpicas, Cuba dominó con el liderazgo de Luis, en numerosos campeonatos mundiales y copas internacionales.
Mireya, es inspiración dentro y fuera de la cancha. Con su historia ha empujado a mujeres, a perseguir sus sueños sin importar los obstáculos físicos o sociales. Ella es un recordatorio de que todo lo puedes alcanzar si luchas por ello. Es un faro de luz y esperanza para el mundo.
HUELLAS OLÍMPICAS DE MIREYA
Miembro de «Las Morenas del Caribe», e importante dentro de la nómina del voleibol femenino cubano, fue parte de las medallas olímpicas de Barcelona 1992, ganando este evento de forma invicta, también estuvo con mayor responsabilidad, en los títulos olímpicos de Atlanta 1996 y en Sydney 2000.
Considerada como una de las 10 mejores deportistas en la historia de Cuba, también fue medallista de los Juegos Centroamericanos y del Caribe en la edición de Maracaibo 1998, y en los Juegos Panamericanos, en cinco oportunidades.
Las huellas de Luis se mantienen dentro del mundo olímpico, al formar parte en la actualidad del Comité Ejecutivo de la NORCECA y de la Federación Internacional de Voleibol.
Escrito por Yanny Figueroa